Mientras que los azotes de la crisis son cada día más fuertes, nuestros queridos gobernantes se empeñan en inventar conflictos para después remediarlos con leyes tan injustas como innecesarias. No soy fumadora y nunca me he sentido maltratada o perjudicada por los fumadores que he tenido a mi alrededor. Alguna vez me he marchado de algún local porque se me hacía imposible respirar debido al humo del tabaco, pero no he culpado a los fumadores por ello, en todo caso al propietario por no tener el local bien acondicionado. También he abandonado algún bar por un excesivo olor a fritanga y no he sentido nunca deseos de expulsar de allí a los amantes del pescaíto frito. Y qué decir del olor nauseabundo a cuerpo en descomposición que tengo que soportar a primeras horas de la mañana montada en un vagón de metro. Eso sí que puede matar.No creo que esto sea un nuevo revuelo mediático del Gobierno para camuflar asuntos de mayor importancia. Aquí no hay maniobras de distracción. Los socialistas han decidido convertir a los fumadores en unos apestados, y mañana serán otros. Nada importa que el sector de la hostelería se resienta. Bajarán sus ingresos, se despedirá a personal y los negocios cerrarán, engordando aún más las listas del paro. Lo único importante es que el proyecto de ingeniera social de Zapatero sigue su curso. Esto es sólo una vuelta de tuerca más.
Entradas
Eva, comparto totalmente tu entrada, solo señalar tambien que la boina de contaminacion que se observa desde las afueras de Madrid, estoy seguro que es mas nociva que el humo del tabaco.
ResponderEliminarSaludos
Todo son experimentos para ver si la sociedad responde.
ResponderEliminarAl ver que el paisanaje está callado, continuan con su ofensiva contra las libertades.
Hoy es la excusa de la salud, mañana cualquier otra.
Muy acertado lo de ingenieria social. De eso se trata. Es absurdo que alguien no pueda tener un bar para fumadores si es su deseo. Hasta podría exigir que sólo pudieran entrar los que llevara un cigarrillo encendido.
ResponderEliminarY como dice Helios, si se preocupasen por la salud de los ciudadanos, limitarían el tráfico en las ciudades, prohibirían los motores diesel en los coches y darían ejemplo eliminado los cochazos oficiales que tienen cientos de caballos y es un despilfarro de energía y de contaminación.
el meollo del asunto reside en una cuestión tan fundamental en nuestro ordenamiento jurídico, como es el respeto a la propiedad privada.
ResponderEliminarEl dueño o propietario de cada bar, está en su perfecto de derecho a decidir si quiere o no quiere que se fume en su local.
Cada parroquiano, de igual modo, debe tener plena libertad para decidir en qué bar quiere tomarse un café y fumarse un cigarrillo, y en cuáles no quiere entrar.
De lo que hablamos es de libertad.
Para todos.
Para el dueño del bar que quiere que sus clientes fumen.
Para el dueño del bar que quiere que sus clientes NO FUMEN.
Para los fumadores.
Para los no fumadores.
Si los fumadores procuramos no molestar, los no fumadores no tienen porqué morirse de asco con el humo. Había solucciones intermedias pero llevas razón, quieren transformarnos, y ojo con las cortinas de humo que pueden ser muy peligrosas.
ResponderEliminarAdemás, la prohibición incide en un país cansado de chorradas y de historias, que lo único que necesita es que se cree empleo y se le devuelva su dignidad.
Un saludo Eva.
Los socialistas llevan en su ADN la necesidad de prohibir o imponer algo para sentirse más poderosos.
ResponderEliminarAdemás, mientras se habla del tabaco, del aborto de ..., no se habla del paro ni de la crisis económica en que nos han metido.
Un abrazo
De acuerdo con la entrada y los comentarios (hay que ser muy... para opinar otra cosa)
ResponderEliminarYa lo creo, Helio. Esperemos que nuestros políticos dejen el coche oficial y se muevan en bici para cuidar nuestra salud.
ResponderEliminarUn saludo.
Aspirante, el caso es cambiar la sociedad española. Han atacado a la familia, a la religión, a las instituciones, ahora les ha llegado el turno a los fumadores.
ResponderEliminarSaludos.
Bucan, a Zapatero y sus secuaces les importa un pito la salud de la gente. Lo importante es prohibir. Pajín quiere prohibir hasta los insultos.
ResponderEliminarSaludos.
Natalia, la propiedad privada está estrechamente ligada a la libertad individual. Por eso, esta ley es un ejemplo clarísimo del desprecio que tiene el Gobierno por este concepto.
ResponderEliminarSaludos.
Candela, han publicado hace poco un libro que es la clave de todo. Se llama Proyecto Zapatero. Crónica de un asalto a la sociedad. Lo ha escrito Ignacio Arsuaga y Miguel Vidal Santos y lo publica HazteOir.org. En su página se puede comprar y te lo envian a casa en 48 horas. Se lo recomiendo a todo el mundo.
ResponderEliminarUn saludo.
José Luis, como digo, no creo que esto se haga como maniobra de distracción. Necesitan imponer su voluntad en todo, aunque sea en contra de la mayoría.
ResponderEliminarSaludos.
Carlos, me alegro de que coincidamos. Creo que los que defendemos la libertad sabemos que se pueden hacer las cosas de otra forma.
ResponderEliminarUn saludo.